Ahora que ya tenemos una buena cantidad de planteles con un SGC operando, es conveniente reflexionar en un punto muy importante, que de cierta manera tiene relación con el tema de los indicadores.
¿Cómo se sabe que un SGC está operando correctamente?. Obtener y mantener un certificado no es garantía de que el SGC esté operando correctamente. De hecho, con mucha frecuencia la certificación es solamente un gasto inútil, especialmente cuando en las auditorías externas (realizadas por "la certificadora") no se encuentran NO Conformidades, pues en este caso, ¿qué le está aportando este organismo externo a la institución certificada?; dar "constancia de un hecho", al estilo de los notarios públicos (uno de los negocios más rentables, reservado solamente para una pequeña élite muy cercana al círculo del poder estatal) es algo muy caro para una organización que quiere mejorar continuamente su producto o servicio.
Como reza la expresión que caracterizaba a los compañeros de la DGICO (el buen amigo, Dr. Luviano Lomelí) y que nos gustó tanto que la adoptamos en la DGCFT, "Un modelo de calidad en una organización educativa debe ser: impulsado por los directivos, adoptado por los maestros y empleados y percibido por los alumnos y la sociedad". Aunque esta expresión está dentro de uno de los materiales didácticos de nuestro curso de actualización de auditores internos del SGC, probablemente no fue completamente comprendido por los participantes.
La expresión significa lo que es precisamente la verdadera demostración de que un SGC está operando correctamente en una organización: lo que importa es la percepción del cliente.
Una de las cosas que más valora un cliente es EL TIEMPO DE RESPUESTA DE LA ORGANIZACIÓN A SUS DEMANDAS. Si el cliente (alumno) quiere inscribirse, valora como símbolo de calidad que el proceso no sea tortuoso, repetitivo o ilógico; si un alumno está inscrito en un curso, ¿por qué le exigimos los mismos documentos que ya presentó, para inscribirse al curso siguiente?, ¿por qué tiene que esperar meses para tomar un curso que le interesa?, ¿por qué deben transcurrir días para que le sea entregada la credencial respectiva?.
Lo trágico es que a veces, se nos olvida el cliente interno: ¿por qué los docentes externos deben esperar semanas para que sus servicios profesionales les sean pagados?.
Complementen la lista con los parámetros que se les ocurran y tendrán un listado de aspectos a mejorar realmente, sin necesidad de pagarle a un organismo certificador para que les diga que "su SGC está muy bien, no tienen No Conformidades".
Sí, se percibe que sigo siendo reacio a la certificación. Un buen SGC no la necesita y uno malo, no la merece.
miércoles, 4 de diciembre de 2013
sábado, 23 de noviembre de 2013
El día de ayer, viernes 22 de noviembre de 2013, asistí al evento de Rendición de Cuentas del ciclo escolar 2012-2013. Como solía decir Don Estelio Baltazar Cadena, no termino de entender este "ejercicio republicano".
Pero el asistir me permitió realizar varias reflexiones en torno a nuestro que hacer fundamental, ubicados como estamos, dentro del nivel de Educación Media Superior. El Dr. García Fraile dictó una conferencia sobre "Competencias construídas bajo un enfoque sociocultural" en la que expresó algunos puntos que me parecen muy interesantes:
1.-las competencias son una construcción en equipo: todo el personal del plantel debe contribuir a hacerlas realidad.
2.- Es condición básica que el docente DOMINE SU MATERIA (para nosotros, que DOMINE SU ESPECIALIDAD)
3.- Se basan en los SABERES PREVIOS (del capacitando, no del docente, por supuesto!!)
4.- En esto de las competencias, el sujeto importante es EL ALUMNO.
Nuestro actual Director General, en su participación que cerró la reunión, dijo, entre otras cosas, que es tiempo de reflexionar sobre lo que hemos hecho en estos 50 años de existencia para adecuar nuestros servicios a lo que demandan estos tiempos modernos. Para ello, ya se han realizado diversas reuniones con personal de diversos niveles de la DGCFT y en la próxima semana se reunirán todos los directores de plantel y SCEO/Asistencias del país.
Creo, tal como dijo el Dr. García Fraile, que en los CECATI tenemos la capacidad de realizar el cambio (obligadamente, porque estamos en la SEMS y en ella, todos sus niveles ya tienen los respectivos programas de estudio bajo el enfoque de competencias) de nuestros programas de estudio de todas las especialidades.
Pero a pesar de que el Dr. García Fraile insistió en que las competencias deben enfocarse dentro de dos renglones más amplios, como son una Programa de Vida y un Plan de Carrera, donde se insertan las competencias del campo laboral o profesional, yo insisto en que el alumno, nuestro primer cliente, tiene como primer requisito, que el docente le transmita sus conocimientos técnicos, “los secretos de la profesión”, de manera rápida, sincera y amable.
Todo lo demás, es accesorio. Y pueden ver lo que dice un artículo de la famosa revista de Warthon, respecto a la fidelidad de los clientes en http://www.wharton.universia.net/index.cfm?fa=viewArticle&id=2403&language=spanish
Obviamente, no niego que me encuentro emocionado con el enfoque de esta ponencia. Me parece un reto digno de los CECATI, al que, con un buen liderazgo, responderemos como sabemos y lograremos resultados satisfactorios que ayudarán a nuestros alumnos.
Pero el asistir me permitió realizar varias reflexiones en torno a nuestro que hacer fundamental, ubicados como estamos, dentro del nivel de Educación Media Superior. El Dr. García Fraile dictó una conferencia sobre "Competencias construídas bajo un enfoque sociocultural" en la que expresó algunos puntos que me parecen muy interesantes:
1.-las competencias son una construcción en equipo: todo el personal del plantel debe contribuir a hacerlas realidad.
2.- Es condición básica que el docente DOMINE SU MATERIA (para nosotros, que DOMINE SU ESPECIALIDAD)
3.- Se basan en los SABERES PREVIOS (del capacitando, no del docente, por supuesto!!)
4.- En esto de las competencias, el sujeto importante es EL ALUMNO.
Nuestro actual Director General, en su participación que cerró la reunión, dijo, entre otras cosas, que es tiempo de reflexionar sobre lo que hemos hecho en estos 50 años de existencia para adecuar nuestros servicios a lo que demandan estos tiempos modernos. Para ello, ya se han realizado diversas reuniones con personal de diversos niveles de la DGCFT y en la próxima semana se reunirán todos los directores de plantel y SCEO/Asistencias del país.
Creo, tal como dijo el Dr. García Fraile, que en los CECATI tenemos la capacidad de realizar el cambio (obligadamente, porque estamos en la SEMS y en ella, todos sus niveles ya tienen los respectivos programas de estudio bajo el enfoque de competencias) de nuestros programas de estudio de todas las especialidades.
Pero a pesar de que el Dr. García Fraile insistió en que las competencias deben enfocarse dentro de dos renglones más amplios, como son una Programa de Vida y un Plan de Carrera, donde se insertan las competencias del campo laboral o profesional, yo insisto en que el alumno, nuestro primer cliente, tiene como primer requisito, que el docente le transmita sus conocimientos técnicos, “los secretos de la profesión”, de manera rápida, sincera y amable.
Todo lo demás, es accesorio. Y pueden ver lo que dice un artículo de la famosa revista de Warthon, respecto a la fidelidad de los clientes en http://www.wharton.universia.net/index.cfm?fa=viewArticle&id=2403&language=spanish
Obviamente, no niego que me encuentro emocionado con el enfoque de esta ponencia. Me parece un reto digno de los CECATI, al que, con un buen liderazgo, responderemos como sabemos y lograremos resultados satisfactorios que ayudarán a nuestros alumnos.
miércoles, 5 de junio de 2013
¿UN SISTEMA DE CALIDAD NO DECLARADO?
Por la necesidad de resolver problemas personales referidos a mi antigüedad en el trabajo, en días pasados tuve la necesidad de trasladarme a mi siempre querida ciudad de Guadalajara.
Allá, el edificio de la SEP está en la orilla de una de las orillas de la ciudad ( o sea, hasta el quinto infierno) y después de peregrinar durante horas (máxime que el transporte público se encuentra en una fase de revisión) me encontré con sorpresa ante un edificio cuya entrada a base de cristal parecía más un edificio empresarial que uno del servicio público.
Una muy amable mujer me indicó cortésmente que debía registrarme en un cuaderno de los que se emplean clásicamente en nuestras instituciones escolares para ese fin. Pero inmediatamente me preguntó si sabía cómo llegar adonde debía dirigirme para tratar el asunto que le planteé; me dió indicaciones precisas y me invitó a seguir adelante.
Unos cuantos metros adelante, un guardia privado me dijo simplemente "bienvenido a la SEP".
En una mesa de control (típica también en nuestro medio) la encargada de "Información" me preguntó sobre el asunto al cual iba y al saberlo me indicó: "ése asunto corresponde a -X-; tome asiento por favor, porque en este momento atiende a una persona. En cuanto se desocupe lo pasaré con él".
Antes de cinco minutos, a pesar de que ya tenía una manifestación de personas que iban también a tratar asuntos, se puso de pié y gritó: "¡el maestro que viene a tramitar una Hoja única de servicios, pase por favor"!
Ése era yo, así que me acerqué y ella me indicó simplemente: "la compañera lo llevará a donde le atenderán" y me indicó a una mujer que estaba a un lado, quien me invitó a sseguirla dentro de las oficinas, me presentó a un joven encargado de la hojas únicas de servicios, le explicó mi asunto y me dejó con él.
El jovencito - realmente era bastante joven, unos 23 a 25 años máximo - me indicó que dejaría todos los asuntos que tenía por atender, para elaborar lo que yo solicitaba, pero me aclaró que, debido a que la hoja debe llevar la firma de dos jefes de departamento, conseguir esas firmas era algo problemático, por lo que mi asunto tardaría fácilmente dos horas, por lo que podía salirme y regresar en ese plazo, que solamente era necesario que esperara unos minutos para revisar la hoja que elaboraría y presentaría a firma de sus jefes.
A lo máximo en cinco minutos me buscó en mi lugar de espera y me presentó un borrador de la hoja de servicios que yo solicitaba y me indicó tachar con pluma lo que no debería aparecer y escribir lo que hiciera falta; después de corregir un par de errores, me dijo que podía retirarme por el momento.
Salí y me dediqué a recorrer el edificio. Quienes han ido a un edificio de SEP en el estado, ya sabrán que los planos son idénticos para cualquier estado de la república, así que conociendo el de Michoacán y el de Puebla, encontré que son muy pocas diferencias las que tiene el edificio de Jalisco. Pero algunos pequeños detalles le dan un ambiente más agradable, como unas jardineras colocadas en el centro de la plazoleta principal.
Cerca de una hora después regresé a mi lugar de espera y al poco tiempo se me acercó el joven que me atendía para explicarme que uno de los dos jefes que debían firmar mi hoja había salido de comisión y que no regresaría en todo el día y para no hacerme esperar inútilmente o volver otro día, me ofreció su teléfono, dirección de correo electrónico y de Skype y me indicó que, si tenía algún problema donde presentaría mi hoja única que me estaba entregando, debido a que una firma no era original sino de facsímil, se lo indicara y la reelaborarían, conseguirían las dos firmas autógrafas y me la enviarían por mensajería con cargo a ellos!!!!!
Fracamente me vine pensando solamente en dos posibilidades:
1.- La SEP en Jalisco tiene trabajando un Sistema de Gestión de la Calidad no declarado (en ninguna parte ví los clásicos posters declarando la Visión, Misión y Valores de la institución) que le está funcionando MUY BIEN!!!!
2.- A los pobres trabajadores de la SEP en Jalisco nadie les dijo, cuando los contrató, que estarían trabajando para el gobierno y lo hacen como si lo estuvieran haciendo para una de las mejores empresas de la iniciativa privada.
Ya saben que acostumbro a ser muy crítico. Hoy quiero hacerlo, dejando constancia de que en el sector público, en la SEP de Jalisco, he encontrado un ejemplo de que la calidad está en las personas, no en los equipos ni en las instalaciones.
La pregunta es: ¿cómo han logrado ésto?
Allá, el edificio de la SEP está en la orilla de una de las orillas de la ciudad ( o sea, hasta el quinto infierno) y después de peregrinar durante horas (máxime que el transporte público se encuentra en una fase de revisión) me encontré con sorpresa ante un edificio cuya entrada a base de cristal parecía más un edificio empresarial que uno del servicio público.
Una muy amable mujer me indicó cortésmente que debía registrarme en un cuaderno de los que se emplean clásicamente en nuestras instituciones escolares para ese fin. Pero inmediatamente me preguntó si sabía cómo llegar adonde debía dirigirme para tratar el asunto que le planteé; me dió indicaciones precisas y me invitó a seguir adelante.
Unos cuantos metros adelante, un guardia privado me dijo simplemente "bienvenido a la SEP".
En una mesa de control (típica también en nuestro medio) la encargada de "Información" me preguntó sobre el asunto al cual iba y al saberlo me indicó: "ése asunto corresponde a -X-; tome asiento por favor, porque en este momento atiende a una persona. En cuanto se desocupe lo pasaré con él".
Antes de cinco minutos, a pesar de que ya tenía una manifestación de personas que iban también a tratar asuntos, se puso de pié y gritó: "¡el maestro que viene a tramitar una Hoja única de servicios, pase por favor"!
Ése era yo, así que me acerqué y ella me indicó simplemente: "la compañera lo llevará a donde le atenderán" y me indicó a una mujer que estaba a un lado, quien me invitó a sseguirla dentro de las oficinas, me presentó a un joven encargado de la hojas únicas de servicios, le explicó mi asunto y me dejó con él.
El jovencito - realmente era bastante joven, unos 23 a 25 años máximo - me indicó que dejaría todos los asuntos que tenía por atender, para elaborar lo que yo solicitaba, pero me aclaró que, debido a que la hoja debe llevar la firma de dos jefes de departamento, conseguir esas firmas era algo problemático, por lo que mi asunto tardaría fácilmente dos horas, por lo que podía salirme y regresar en ese plazo, que solamente era necesario que esperara unos minutos para revisar la hoja que elaboraría y presentaría a firma de sus jefes.
A lo máximo en cinco minutos me buscó en mi lugar de espera y me presentó un borrador de la hoja de servicios que yo solicitaba y me indicó tachar con pluma lo que no debería aparecer y escribir lo que hiciera falta; después de corregir un par de errores, me dijo que podía retirarme por el momento.
Salí y me dediqué a recorrer el edificio. Quienes han ido a un edificio de SEP en el estado, ya sabrán que los planos son idénticos para cualquier estado de la república, así que conociendo el de Michoacán y el de Puebla, encontré que son muy pocas diferencias las que tiene el edificio de Jalisco. Pero algunos pequeños detalles le dan un ambiente más agradable, como unas jardineras colocadas en el centro de la plazoleta principal.
Fracamente me vine pensando solamente en dos posibilidades:
1.- La SEP en Jalisco tiene trabajando un Sistema de Gestión de la Calidad no declarado (en ninguna parte ví los clásicos posters declarando la Visión, Misión y Valores de la institución) que le está funcionando MUY BIEN!!!!
2.- A los pobres trabajadores de la SEP en Jalisco nadie les dijo, cuando los contrató, que estarían trabajando para el gobierno y lo hacen como si lo estuvieran haciendo para una de las mejores empresas de la iniciativa privada.
Ya saben que acostumbro a ser muy crítico. Hoy quiero hacerlo, dejando constancia de que en el sector público, en la SEP de Jalisco, he encontrado un ejemplo de que la calidad está en las personas, no en los equipos ni en las instalaciones.
La pregunta es: ¿cómo han logrado ésto?
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